Segunda entrega o quinta, según se mire, de la saga galáctica más popular de la historia del cine. Y una de las cintas más taquilleras de los más de cien años que llevamos de cine.

El imperio contraataca reunió nuevamente al mismo equipo técnico y humano de su antecesora, "Una nueva esperanza", si bien en esta ocasión George Lucas el creador y director de la historia, se aparta de la dirección y la lega a un veterano director británico Irvin Kershner la filmación de la película.

También se desarrollan y humanizan más los personajes como por ejemplo la relación de amor –odio entre Han y Leia o la instrucción que recibe Luke Skywalker para convertirse en un Jedi, según las enseñanzas del maestro Yoda, un personaje entrañable y nuevo en la historia que añade simpatía y optimismo. Como también lo es el amigo de Han Solo, Landon Calrisian o el caza recompensas bobafet, fichajes nuevos que le dan frescor a esta nueva entrega de star wars.

En general se nota un repunte de recursos para llevar a cabo esta obra maestra de aventuras espaciales a pesar de que todo se hacía artesanalmente y nada por ordenador, las naves espaciales, los decorados, los planetas que aparecen, el halcón milenario cruzando un campo de asteroides, te lo crees todo y en ese sentido no se puede decir otra cosa que la película es de un acabado excelente, a la altura de la anterior e incluso superior a pesar de tener más de treinta años.

La fotografía, la banda sonora de John Williams son otros aspectos que destaco de la película. Y el final, que final¡ mítico, un bis a bis entre Luke y Dart Vader con sorpresa final que da un giro de 360º a la historia y que la deja preparada para la siguiente continuación. Que la fuerza os acompañe.