Esperaba un bodriete y la verdad es que me ha sorprendido, pero para mal porque menuda hez purulenta y sifilítica han defecado los orangutanes que han tecleado el guión de esta abominación, porque mira que después del trailer era evidente que esto iba a ser cáncer radioactivo, pero ni ciego de agua de grifo pensaba que esto iba a ser peor que morir entre llamas.

La hija de puta hace el más absoluto honor a todas esas mierdas de adaptaciones de videojuegos, comics y mangas de los 90 donde los responsables tenían la imperiosa necesidad de toquetear, occidentalizar y cambiar absolutamente todo, adaptando la obra original pasándosela por sus enormes cojones pensando que su visión particular era mejor que la del puto creador y creyendo que los seguidores tragarían con todo porque total solo son niños gilipollas.

No sé porque se llama Caballeros del Zodiaco si solo sale Seiya con una armadura de plástico grimoso de Bangladesh que solo sale al final de la peli junto con un Fénix que es un tio random que no se llama Ikki y que parece un presidiario haciendo cosplay, es acojonante lo feas que son las putas armaduras. La historia original aunque no la conozcas, si no eres subnormal sabrás que NO va de que el villano es la madre de Atenea que tiene un ejército, naves y se dedica a secuestrar a niños para curarse sus brazos robóticos. Cine con mayúsculas señores.

El casting es maravillosamente imbécil, respetan algunos nombres originales pero donde antes tenías a un honorable anciano, ahora tienes a Sean Bean haciendo de americano con nombre y apellido japonés, a lo mejor se piensa que así se libra de morir el muy pardillo. La villana es Famke Jensen, ya sabéis, ese mujerón que se convirtió en la mayor atrocidad que han cometido los bisturis en toda la historia de Hollywood y que ya te sale en cualquier película o bautizo. Mark Dacascos hace del mayordomo de Atenea pero con tatoos y pistolas claro, ah y también tenemos al renacuajo y odioso actor que hacia de John Connor en Terminator 3 interpretando a un personaje que debería medir 4 metros, ya no me acordaba de este tio, me alegro que no se haya suicidado.

Nada se salva de este aborto satánico, una historia tan épica como ver a una abuela cruzar la calle, personajes con el carisma de una cucaracha reventada en el suelo, efectos especiales de segundo de informática de un centro cívico de Lavapies, conversaciones de obra de teatro de niños sirios en un campo de refugiados, peleas que solo pueden contentar a gente con mermas y con unas animaciones que a su lado los moñecos digitales de Blade 2 parecen hechos con motioncapture... lo tiene todo la muy puta, ni la ira de Dios mezclada con el Rayo de Zeus y la diarrea de Mahoma es peor que este feto malformado que se erige con orgullo como el más digno de los sucesores de Dragon Ball Evolution.

Resumiendo, muy recomendable.