Curiosa precuela de la mundialmente famosa "El exorcista", que fue prohibida por la productora Warner ya que no gustó a sus directivos, que al año siguiente realizaron otra con el mismo nombre, "El exorcista, el comienzo" con el mismo actor principal, Stellan Skarsgard, pero cambiando al director que fue Renny Harlin. Paul Schrader, director de esta película, tuvo que recurrir a los tribunales para que llegara a estrenarse, pero nunca en las salas, sino directamente al mercado de DVD y los video clubs privados.

Vemos al padre Merrin años antes de la posesión de Regan, que tras un episodio con los nazis en Holanda, cuestiona su propia fe, estando en excedencia del sacerdocio mientras practica su profesión de arqueólogo. En esta película se le ve practicar su primer exorcismo.

Bastante floja en comparación a la filmada por William Friedkin treinta años antes, aunque en realidad no existe comparación posible con esa película de ninguna de las que la han sucedido durante todos estos años. Como curiosidad, se deja ver, aunque el terror está muy diluido.

Mi nota, un 6.