La primera peli que vi de Roger Moore interpretando a James Bond fue "La espía que me amó" y me pareció deleznable. Es más, le hice una crítica en esta web donde puse al señor Moore a la altura del betún o más abajo si cabe... y es en esta entrega dónde corrijo lo que dije de que era un Bond pésimo. No me parece tan malo ahora.

Quizás fue por el director de la otra o porqué aquí el agente 007 es mucho más rudo, duro y elegante... quizás fuere porqué el humor de aquella, era de un nivel prenatal y no me hizo soltar ni la más leves de las sonrisas, mientras que en esta me pareció mucho más sutil y fino... ¡hasta se burlan de los americanos!

Bien hay que decir que también gana enteros el film con un villano perfectamente interpretado por un magnífico Christopher Lee! ¡Scaramanga! (que nombre.... y ¡que hombre!) de momento de los mejores villanos de la saga a mi humilde parecer.

El film en cuestión tiene un guión bastante elaborado con algún que otro giro inesperado y bastante intriga, las escenas de acción son en su mayoría peleas a guantazo limpio o al viejo estilo del señor Bruce Lee (debido a que el argumento se da, en su mayor parte, en Asia)...aunque se le notan el paso de los años. Tenemos también un par de persecuciones a coche satisfactoriamente bien rodadas y hasta una pirueta en un puente con looping incluido, al más puro estilo Dragon Khan, que me sorprendió gratamente.

Reconozco que hasta la fecha es uno de los mejores films de la saga que he visto... por lo menos, y aunque parezca absurdo, uno de los más reales.