La película reúne lo mejor de una película de cine negro sin acción. Más bien de misterio.

Cuando finaliza la película y sabes los motivos, piensas que realmente la película no tiene una trama complicada, lo complicado es la forma en el que lo han mostrado.

También la mezcla algo peculiar, de meter a una monja como protagonista en un misterio de asesinato. Es quizás esta mezcla lo que la hace interesante.

Esta película estaba prevista para empezar en 1947, pero se retraso como 2-3 veces porque Joan Fontaine tenía otros proyectos y se iba retrasando, finalmente en el 1949 se quedó embarazada y Universal cambió el reparto. Supongo que cansada de esperar.

Claudette me gusta mucho, pero tiene mucha experiencia en comedias y en ser una mujer divertida, desenfadada y con chispa, para este papel, aún así lo hace bien.

Sobre el título de mi crítica, lo comento porque al final es como una película de Agatha Christie, donde reúne a todos los protagonistas de la historia en un único lugar sin posibilidad de escaparse, y hay mucha casualidades para que la monja pudiera desentramar los misterios, y eso la hace poco creíble.

Eso sí, la imagen es muy bien.