Haz click aquí para copiar la URL
España España · Málaga
Voto de Kaori:
6
Drama. Romance Cuando Hamlet, el príncipe heredero de Dinamarca, regresa a su patria, recibe la noticia de que su padre ha muerto y de que su madre, la reina Gertrudis, se va a casar con su tío Claudio. El espectro de su padre le revela que Claudio es el responsable de su muerte. A partir de entonces, Hamlet sólo pensará en vengar la muerte de su progenitor. (FILMAFFINITY)
14 de junio de 2013
6 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Kenneth Branagh, un amante declarado del teatro y de Shakespeare, se puso manos a la obra y adaptó, dirigió y protagonizó su propio «Hamlet». Como ya he dicho otras veces, «Hamlet» no está entre mis tragedias favoritas, pero el trabajo de Branagh hay que reconocer que es valiente y admirable.

Su Hamlet vive a finales del siglo diecinueve y lleva un atractivo traje de luto de inspiración militar que hace de su presencia en medio del palacio blanco un hermosísimo contraste. Perilla, pelo rubio y ojos verdes para un Branagh que consigue transmitir todo el espectro humano emocional a través de un príncipe apasionado con poco de soñador y con un cerebro en perpetua duda. La fidelidad al texto original es el riesgo que tomó, y de ahí que presenciemos casi cuatro horas de Shakespeare en estado puro. Y es posible que nunca comprendamos tan bien la esencia de esta obra. Hamlet se mira al espejo y habla con su otro yo eso de «ser o no ser» mientras el público, nosotros, contenemos la respiración. Dan ganas hasta de aplaudir.

Puesta en escena y decorados asombrosos, tan bellos que emocionan por sí mismos, pero, a mi me parecer, poco aprovechados. Echo en falta un poco más de arte por el arte, algo de fausto esteticismo sin causa ni motivo aparente que consiga trascender la mera dirección técnica. No sé, cierta coquetería en la factura, ciertas imágenes concebidas para los ojos antes que para el oído, haciendo que esos salones, tapicerías y suelos de baldosas de ajedrez tengan también su protagonismo. Por poner un ejemplo, el momento confeti es casi sobrecogedor, pero termina siendo algo aislado. Una pena.

Banda sonora apropiada, respetuosa escena del cementerio que me ha sacado la lagrimita, una Kate Winslet que es Ofelia hasta que no se demuestre lo contrario (¡pero que lástima que da!) y un desenlace a esgrima y sangre que realmente sobresale.

Toda una superproducción que, como se podrá suponer, no se ganó al público de su época, lo cual no demuestra absolutamente nada. Recomendable.
Kaori
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow