Gran peli que narra la historia de un padre y un hijo intentando sobrevivir en un futuro no muy lejano, dónde un cataclismo extraño ha acabado con toda forma de vida en el planeta, sólo quedando unos pocos humanos que se devoran entre ellos. La mágia que desprende el film es impresionante, al igual que el ritmo, pausado pero perfecto. És emotiva hasta decir basta, ya que sufres por nuestros dos héroes a la fuerza. Viggo Mortensen hace el papel de su vida, y el niño protagonista tiene una actuación ejemplar, esa relación que tiene con el padre y sus diferencias a la hora de ver bondad en las personas és magistral. Sin desmerecer tampoco a Charlize Theron (la madre), o a Robert Duvall (un anciano al que se encuentran). El director nos plantea un fil magistral que espero que se lleve muchos premios, porque de verdad se los merece.