Realmente impactante, asombra mucho más que "Black Hawk Derribado" (la cual utilizaba muchos más muñones, vísceras y hemoglobina con menos eficacia que la que nos ocupa), pues sus imágenes son crudas y realistas, y ante nuestro estupor, vemos cómo los fanáticos matan incluso a niños pequeños. Es una película dura, en la que se demuestra el valor de los que deciden actuar en lugar de quedarse parados (y no hablo sólo de los soldados yankis). La pena es que al final, los capitanes que antaño ignoraban al bueno de Bruce ahora le apoyan a él y a los "negritos", en un patriotero giro argumental. Pero es que el excelente tramo final compensa con creces este fallo con ingentes dosis de violencia, lágrimas, y una emoción contenida que no te deja respirar en un incesante crescendo narrativo de un cuarto de hora, aumentado por la fotografía de Mauro Fiore y la estupenda y desgarrada banda sonora del genio Hans Zimmer y Lebo M, hasta que llega el desenlace, heroico y trágico al mismo tiempo. Y las interpretaciones, muy buenas, especialmente Bruce, Monica Bellucci, y algunos de los africanos que padecen en sus carnes la guerra. Altamente recomendable.
spoiler:
Frases como: "Dios se marchó de África" o el momento en que Bruce piensa en sus soldados caídos cuando está a punto de marcharse, y el personaje de Monica Bellucci le abraza para consolarlo, contribuyen al nueve que le he dado a esta infravalorada obra de Antoine Fuqua.