Una canguro de 15 años es pillada maltratando al niño que está cuidando por sus padres. Rápidamente el pequeño pueblo irlandés en el que viven entra en un estado de histeria colectiva y no saben que hacer con la niña. Una psiquiatra es enviada para tratar de poner un poco de cordura y buscar la causa de tal atroz suceso.

Agnès Merlet rueda una película más del género de suspense y de miedo psicológico. Por algunos momentos potable pero en líneas generales bastante floja. La alquilas pensando que va a ser “una peli de miedo que te cagas” pero no es nada de eso. A pesar del poder de la mente y del cual la película trata algo, es de lo poco destacable. No obstante, trata de manera aceptable la idiosincrasia de las comunidades cerradas y de provincias, que acaban comportándose como pequeñas sectas. Pero insisto que en el videoclub hay bastante más para elegir con más acierto, de cualquier género posible antes que alquilar esta cinta.

Lo mejor: Los continuos giros, las dotes de ventrílocua de la niña protagonista y la forma en que se trata el origen de sus aristas.

Lo peor: Poco aporta al género y es bastante light porque a poco que hubiera sido un poco más perversa, hubiese tenido un pase. El papel del cura exigía a voces tener un papel más protagonista y no quedarse en mera comparsa.

Nota: 3,5/10