Media votos
6.1
Votos
4,616
Críticas
263
Listas
47
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
- Sus redes sociales
-
Compartir su perfil
Voto de mnemea:
6
![](https://filmaffinity.com/images/myratings/6.png)
7.2
12,310
Drama
Khaled y Said son dos jóvenes palestinos, amigos desde la infancia, a los que reclutan para llevar a cabo un atentado suicida en Tel Aviv. Después de una última noche con sus respectivas familias, de las que no les está permitido despedirse, parten hacia la frontera con explosivos pegados al cuerpo. Sin embargo, nada sale como estaba previsto y una serie de contratiempos les obliga a separarse. Entonces tendrán que replantearse su vida ... [+]
25 de marzo de 2009
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Soldados de Dios, soldados del destino, soldados subvencionados por el estado. Me dicen que todos sirven para el ataque y trabajan bien en la defensa. En realidad los observo y me causan una gran intriga, no conozco sus motivaciones, ni su vocación, cualquiera querría escuchar de su viva voz su historia, pasado y futuro, yo soy cualquiera y esa sería una forma de aprender sobre lo desconocido, porque desde mi postura no puedo juzgarlo.
Comienza la película, no parece captar mi atención, pasan los minutos, atiendo a demasiadas cosas a la vez, pero algo sucede, hablan de mañana... es algo sencillo, mañana debes morir por nuestro pueblo. Mañana... nadie piensa en las consecuencias de tremenda palabra. Es muy significativa, es importante, no sólo marca la espera de un nuevo día, señala un futuro, unos planes que consideras posibles por la cercanía en el tiempo y por ello no ocupan ninguna preocupación ¿qué va a pasar de aquí a mañana? muchas cosas, de hecho, alguien puede decidir que mañana debe ser el día del adiós, tu muerte para los ojos del mundo. Esa mirada ya la he visto, la rendición, es fácil pensar en mañana, es extraño confirmar que no habrá ningún otro día.
La suerte de los olvidados, las obligaciones de la fe perdida y practicada. Buscando futuros inciertos por medio de métodos fallidos, se adentran dos hombres con unos ideales marcados en el día clave del resto de sus vidas. Todo está controlado, ¿cómo se controla un suicidio colectivo? ¿cuál es el advenimiento de una muerte obligada?
La reflexión, el mensaje y la acción. El error de cálculos lleva a encuentros, cambios y análisis. Los dos hombres manejan una segunda posibilidad, en los protagonistas se intenta plasmar todas las visiones de un mismo problema, es un modo de contar las cosas sin necesidad de admitir una postura, una forma de explicar que los problemas existen, aunque no los veamos, que las personas aciertan tantas veces como se equivocan, tienen miedos y se enfrentan a ellos, la mayoría de veces del modo más erróneo.
Comienza la película, no parece captar mi atención, pasan los minutos, atiendo a demasiadas cosas a la vez, pero algo sucede, hablan de mañana... es algo sencillo, mañana debes morir por nuestro pueblo. Mañana... nadie piensa en las consecuencias de tremenda palabra. Es muy significativa, es importante, no sólo marca la espera de un nuevo día, señala un futuro, unos planes que consideras posibles por la cercanía en el tiempo y por ello no ocupan ninguna preocupación ¿qué va a pasar de aquí a mañana? muchas cosas, de hecho, alguien puede decidir que mañana debe ser el día del adiós, tu muerte para los ojos del mundo. Esa mirada ya la he visto, la rendición, es fácil pensar en mañana, es extraño confirmar que no habrá ningún otro día.
La suerte de los olvidados, las obligaciones de la fe perdida y practicada. Buscando futuros inciertos por medio de métodos fallidos, se adentran dos hombres con unos ideales marcados en el día clave del resto de sus vidas. Todo está controlado, ¿cómo se controla un suicidio colectivo? ¿cuál es el advenimiento de una muerte obligada?
La reflexión, el mensaje y la acción. El error de cálculos lleva a encuentros, cambios y análisis. Los dos hombres manejan una segunda posibilidad, en los protagonistas se intenta plasmar todas las visiones de un mismo problema, es un modo de contar las cosas sin necesidad de admitir una postura, una forma de explicar que los problemas existen, aunque no los veamos, que las personas aciertan tantas veces como se equivocan, tienen miedos y se enfrentan a ellos, la mayoría de veces del modo más erróneo.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
El final viene como el principio, no capta el interés, sus últimos minutos dejan un vacío en la historia, tal vez el desenlace no afecte porque ya no se distingue el estupor de la realidad y el dolor ajeno, o puede que la frialdad hubiese sido más acertada porque la reflexión no conducía a nada.
Una reflexión sí se puede hacer. Yo he visto a trece hombres sentados en una mesa alargada compartiendo una última cena en común. Unos hombres que querían hacer una masacre, porque Alá es el único Dios y Mahoma es su profeta. El mensaje es confuso, tal vez no exista, y simplemente mi atención se desviara a planos vacíos de significado. Pero desde que vi esa escena, todo perdió un sentido directo.
El final en el que se observa a cada uno de los implicados pensando en a saber qué, no me gustó, no relaciona la importancia de los hechos, no genera una reflexión, sólo vi miradas vacías en secuencias unipersonales y un blanco que muestra que todo sigue igual al terminar. Es el problema de estas películas, cuando terminan, todo sigue igual, veo que lo único útil que he hecho ha sido ver una película, es mi única aportación y es totalmente inocua e inservible.
El suicidio es egoísta, lo mismo que el asesinato, lo malo es que es una respuesta a otro tipo de egoísmo, porque el hombre apareció para hacerse daño a sí mismo a base de amor propio y dolor ajeno. Como siempre, la inocencia es la que acaba perdiendo.
Y los soldados tienen un papel aquí, todo el que luche pertenecerá a su propio ejército y en ese mundo, abrir un ojo al amanecer debe ser como recibir mil piedras contra la conciencia.
Una reflexión sí se puede hacer. Yo he visto a trece hombres sentados en una mesa alargada compartiendo una última cena en común. Unos hombres que querían hacer una masacre, porque Alá es el único Dios y Mahoma es su profeta. El mensaje es confuso, tal vez no exista, y simplemente mi atención se desviara a planos vacíos de significado. Pero desde que vi esa escena, todo perdió un sentido directo.
El final en el que se observa a cada uno de los implicados pensando en a saber qué, no me gustó, no relaciona la importancia de los hechos, no genera una reflexión, sólo vi miradas vacías en secuencias unipersonales y un blanco que muestra que todo sigue igual al terminar. Es el problema de estas películas, cuando terminan, todo sigue igual, veo que lo único útil que he hecho ha sido ver una película, es mi única aportación y es totalmente inocua e inservible.
El suicidio es egoísta, lo mismo que el asesinato, lo malo es que es una respuesta a otro tipo de egoísmo, porque el hombre apareció para hacerse daño a sí mismo a base de amor propio y dolor ajeno. Como siempre, la inocencia es la que acaba perdiendo.
Y los soldados tienen un papel aquí, todo el que luche pertenecerá a su propio ejército y en ese mundo, abrir un ojo al amanecer debe ser como recibir mil piedras contra la conciencia.