"127 Horas" es una de esas películas pequeñas pero a la vez grandes... no sólo destaca, y mucho, por su estética, su montaje multipantalla (marca de fábrica de su director, Danny Boyle) o por su potente banda sonora... sino que, extrañamente, la película consigue conjurar esa alquimia necesaria para transmitir un cúmulo de sensaciones como sólo el buen cine es capaz de hacer...

... y es que esta película desprende un sentimiento de tristeza, desolación y nostalgia en lo que ya es un verdadero canto al espíritu del ser humano.... una fábula sobre lo efímero de la vida...

... y es que las cosas más nimias, las más tontas, las más absurdas... esas cosas, pueden suponer un antes y un después en la vida de cualquiera de nosotros... y la gran virtud de esta película es recordarnos precisamente eso: que la vida es un regalo y que somos extremadamente frágiles...

La estrella de la función es sin duda James Franco, que hace un papelazo de esos que ya huelen a Oscar (merecidísima nominación)... parece mentira que este tipo sea el mismo de las pelis de "Spiderman"... porque desde luego con "127 horas" ya se ha ganado el respeto de muchos... yo que lo tenía como un actorcillo mediocre... qué equivocado estaba...

Película sobre la vida, sobre la fragilidad del ser humano y sobre la grandeza del instinto de supervivencia... y encima basada en un hecho real...

Imprescindible.