Se adivina que la novela en la que está basada la película probablemente sea muy intensa, y seguramente por eso se han decidido a realizar una gran superproducción de ella, pero la película fracasa. La historia no tiene nada especial. En fin que no emociona lo más mínimo.

El trailer, la sinopsis previa y la crítica anticipan la película y no hay nada más, no hay mentiras ocultas, ni vuelcos de última hora, ni secretas confesiones. El final además es rápido y poco desarrollado. Lo mismo ocurre con la historia paralela de la hija. La actuación de Knightley y Clarke, no es mejor por mucha lágrima que suelten.