No. Lo siento, pero no. Ni conmovedora, ni original, ni obra de arte. Ligeramente entretenida porque no dejan de pasar cosas, pero nada más. Demasiado larga, demasiado paranoica. La película funcionaba bien hasta que los niños jugaron a ser dioses con la ciencia. A partir de ahí, la historia decae a pasos agigantados hasta estrellarse contra un final "perfecto", digno del mundo de la gominola. Sinceramente, me importa poco que el padre de Frankenweenie haya sido Tim Burton. El desenlace de esta película me ha decepcionado demasiado. Dentro de un par de días, apenas la recordaré porque no emociona, no divierte, no sorprende. Más bien, me resulta un tanto patética. Además, sus "pequeños" monstruos me parecieron totalmente innecesarios, ya que estropean lo que, por lo menos, podía haberse quedado en una historia aceptable e incluso entrañable. Ciertamente, suena a homenaje. Pero no aprueba.