Rafael Moleón (Baton Rouge) rodó en las costas de Motriko éste thriller basado en un relato de la escritora Françoise Sagan. Después de cerrar su negocio de víveros por mala gestión, Julio (Eduardo Noriega) tiene planes de boda con su prometida Concha (Leire Berrocal) que trabaja en la Administración de Lotería propiedad de su familia. Aunque él ya no vé tan claras las cosas cuando se le presenta la oportunidad de hacerse con un alijo de joyas que encuentra fortuitamente tras encontrarse en el lugar de un accidente . El asunto se precipita cuando entra en escena una mujer francesa (Anna Galiena) que se ha ganado mala reputación y dueña de una pensión en la que no acude nadie.

Al igual que lo hiciera con “Baton Rouge”, Rafael Moleón juega al gato y al ratón en una trama de engaños, complicidades y sexo por en medio a modo de contrarestar cuan miserable puede llegar a ser la vida de alguien cuando se le presenta la oportunidad de hacerse de modo dudoso con un buen botín.

A la película no le falta su punto de nervio erótico (desde la sensual Anna Galiena como polo de atracción hacia un perplejo Eduardo Noriega pero sin tener un pelo de tonto a una no acomplejada Leire Berrocal como novia formal, que se alejan del modo, nulo teniendo en cuenta su caracterización, de Marta Belaustegui).