A l´interieur, damas y caballeros. La panacea del nuevo cine de terror. El Gore más brutal. El paso que necesitaba el cine de terror. Una paja sanguinolenta para los fans del susto y la sangre.

Eso, más o menos, es lo que nos prometían. La introduje en el DVD y pensé "Va a ser la hostia".
Pués al respecto diré: Y una mierda.

¿Eso era el supergore? ¿La renovación del género de terror? ¿Lo que iba a hacer que se me metiera el culo para dentro? Mmmmmmm, a lo mejor nos hemos pasado un poco, pequeñines.

Al margen de que mis espectativas terrorísticas no sevieran cumplidas (que sí las gore y las de mala baba, que de eso tiene un rato y por eso es un cuatro y no un dos, por lo macabra que es), no fué lo que más me impresionó. Lo que más me impresionó es que adolece de los mismos fallos (puede que más) que el clásico terror cutre Made In USA al que todo el mundo se le llena la boca criticándolo, pero en este caso están dispuestos a pasarlos por alto.

Pues como a mí me la sopla que sea francesa, thailandesa o del Principado de Andorra, pues le veo la misma mierda flotante cósmica de siempre. Pero con un esmero superior al habitual en cuanto al divertido liquidillo rojo (no hablo de vino, aunque lo eché de menos durante la película, para hacerla más llevadera).

Realmente, la película tiene muchas tontadas (los planos del bebé en el interior de la madre son, como mínimo, ridículos), y los policías soberanamente memos (algo indispensable en un policía de cine de terror, así que se lo perdonaremos). Sin embargo, la que más me ha fascinado ha sido la que (de un modo disparatado, que es como funciona mi mente) da título a mi crítica, y es el hecho de que viendo esta película he llegado a la conclusión de que los franceses son sordos. Bueno, también carecen de visión periférica, pero tampoco vamos a ponernos tiquismiquis. Tiros, gritos, golpes... y los vecinos, flores. Están matando a alguien en el piso de abajo (con grititos entre dientes, que los franceses para morirse son muy discretos) y arriba no se entera nadie. ¡Incluso puede quitarle a un policía su arma, que tiene a escasos centímetros de él (y no estando sólo) y no se dan cuenta!

La otra opción es que la asesina fuera Ninja, lo cuál explicaría mucho de lo sucedido en la película, pero haría que echara de menos a Cristopher Lambert para ajustarle las cuentas.




Como extraño a Cristopher Lambert.