Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de Aristofanes:
9
Drama Nader (Peyman Moaadi) y Simin (Leila Hatami) son un matrimonio iraní con una hija. Simin quiere abandonar Irán en busca de una vida mejor, pero Nader desea quedarse para cuidar a su padre, que tiene Alzheimer. Ella le pide el divorcio y se muda a vivir con sus padres. Nader no tiene más remedio que contratar a una mujer que cuide a su padre. Una negligencia de la asistenta provoca un conflicto de grandes dimensiones. (FILMAFFINITY)
8 de febrero de 2012
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nos tienen distraídos con esto de las nominaciones y premios cinematográficos, metiéndonos por los ojos las películas de tal o cual actor famoso, “…que si el mejor trabajo de su carrera”,”…que si es un firme candidato al Oscar”, etc., etc. Total, películas de cine auténtico ¿cuántas?, “The Artist”, bien, buena película, ¿“Los descendientes”, “Moneyball”, “El árbol de la vida”, “La dama de hierro”, “Otra Tierra”, “Melancolía”?, por favor, seamos serios, estamos hablando de buen cine y en eso destaca esta película “Nader y Simin: una separación”, cine del bueno, del auténtico, de aquel que no se basa en manidos recursos con guiones surrealistas, historias imposibles, melancolías rebuscadas, vueltas de tuerca (para despistar y deslumbrar al espectador), fenómenos paranormales, metáforas varias y efectivistas recursos sonoros, visuales o efectos especiales.

“Nader y Simin: una separación” no necesita nada de eso, con una buena historia y una sabia dirección de la cámara, el director de la película tiene más que suficiente. La película con la temática de la separación de una pareja en el Irán actual, atrapa desde el principio y cual rehén de la misma no quedaremos liberados hasta el final.

La historia va siendo sabiamente narrada con una cadencia pausada y armónica pero no por ello carente de ritmo y tensión. No hay un solo minuto en la película que carezca de interés, la historia, atemporal por la temática, es extrapolable a cualquier país, pero aquí el director aprovecha para hacer un retrato realista (lo habría firmado el mismo Antonio López) de la actual sociedad iraní, con toda su idiosincrasia social y religiosa. Pero también, como un hábil cirujano, realiza una incursión, muy incisiva, en la condición humana, los valores de la persona como tal, donde afloran los positivos y los negativos (la reflexión, el respeto, la verdad por encima de todo, la religiosidad, la creencia pero también el egoísmo, la manipulación, el engaño, la avaricia, la discriminación y el odio).

Creo que la misma temática realizada por un occidental habría resultado aburrida y monótona, pero en manos del que ha demostrado ser un gran maestro: Asghar Farhadi (guionista y director) consigue mantenernos en tensión desde el principio hasta el final. No quiero dejar de mencionar el extraordinario trabajo de todos los actores y especialmente el de Sareh Bayat (la mujer contratada) y sobre todo Sarina Farhadi en el papel de la hija Termeh, impresionante el trabajo de Sarina, retrata fidelísimamente a una adolescente humilde y tímida a la cual obliga el amor por su padre a ir contra sus más intimas creencias: a mentir. También el director para finalizar deja en sus manos la decisión más dura y crítica que se le puede plantear a un hijo: decidir entre su padre o su madre y su decisión es…
Aristofanes
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow