Cuarta entrega de la popular saga de terror iniciada con la mítica La Matanza de Texas (Tobe Hooper, 1974), que es la única película dirigida por el cocreador de la saga junto a Tobe Hooper, y que está protagonizada por Renée Zellweger (Expediente 39, 2009), y Matthew McConaughey (Interstellar, 2014).

Durante un viaje por Texas, cuatro amigos se equivocan de camino y tienen un accidente en medio de un bosque. Los jóvenes buscan ayuda desesperadamente, pero se verán acosados por una familia de psicópatas asesinos.(FilmAffinity)

Si bien se la ha de reconocer el mérito de no aburrir en ningún momento con un ritmo más que decente, y de un Matthew McConaughey que realiza una labor muy divertida interpretando al loco de turno, hay varias cosas en la trama que traicionan por completo el espíritu de la original, y por mediocres que sean las continuaciones, continuaban una historia que, aunque no demasiado en su segunda entrega, tenía algo de sentido. Leatherface se ha visto en este caso relegado a un segundo plano, además de transformarlo en algo intencionadamente esperpéntico sin ningún tipo de explicación o transición, y los antagonistas principales son en esta ocasión una familia de locos que poco tiene que ver con lo que estábamos acostumbrados.

Sobre ser una película que cumple como placer culpable, La Nueva Generación, se toma demasiadas libertades para pertenecer a una saga y como es obvio a todos aquellos que esperen más de La Matanza de Texas quedarán decepcionados.

Nota personal 4/10