No me voy a extender sobremanera intentando divagar sobre lo que me ha parecido la cinta. Espero que si lees esto te quede claro de que va la película. Carismática, es la palabra que define a esta película. Ya era hora de que pudiéramos disfrutar de una comedía romántica sin tener que caer en las patrañas de Jennifer Aninston o J.Lo.

La película nace de una idea realmente original, Lake Bell es la hija de una de las figuras del doblaje en la industria hollywoodiense que trata de ganarse la vida enseñando a la gente a usar su voz, mientras que intenta hacerse un hueco en el difícil y machista mundo de su padre. El gurú de las voces en off en Hollywood, que es un personaje de la vida real, deja un hueco muy difícil de suplir tras muerte en la industria y nadie como él hasta el momento consigue tener tanto tirón para continuar su trabajo. A partir de ahí con un guión perfectamente desarrollado (los diálogos no flaquean y eso se agradece) y unas interpretaciones de lo más divertidas dentro de su fidelidad a la par que impecables, comienza una carrera para buscar a la que será la próxima voz que aparecerá en el trailer de la siguiente trilogía de culto. Lake Bell que es uno de mis descubrimientos de este año, amén del cañón de mujer, hay que decir que lo clava. Muy divertida sus escenas de distintos acentos.

Posiblemente no sea la mejor película del año, y como de costumbre no tiene apenas repercusión, pero es una muy acertada muestra de la frescura del nuevo cine americano en la que se agradece no ver caras conocidas para creerte un trabajo realmente bien hecho..