"Un lugar tranquilo 2" prometía ser una digna continuación de su predecesora, una película que sorprendió a muchos con su concepto único y sus momentos de estrés creciente. Sin embargo, esta secuela no logra capturar el mismo nivel de tensión y emoción.

En primer lugar, la trama carece de originalidad y se siente forzada. La historia se centra en los mismos personajes que luchan por sobrevivir en un mundo invadido por criaturas mortales que cazan a través del sonido. Aunque la secuela intenta expandir un poco el universo presentado en la primera entrega, todo se siente muy predecible y poco innovador. Los momentos de suspenso, que deberían ser el punto fuerte de la película, son escasos y están mal ejecutados. A diferencia de la primera película, donde cada ruido era motivo de tensión extrema, en esta secuela no se logra generar el mismo impacto y los momentos de calma son más abundantes.

Además, los personajes tampoco consiguen evolucionar o sorprender al espectador. Aunque son interpretados por actores talentosos, sus actuaciones se ven limitadas por un guion plano y predecible. No hay un desarrollo significativo de los personajes y sus acciones y decisiones están dadas más por conveniencia del guion que por una verdadera evolución de personalidad.

La dirección de John Krasinski, quien también interpreta al personaje principal, es aceptable pero no logra capturar la misma magia que en su anterior trabajo. A pesar de algunos momentos interesantes en términos visuales, la película carece de una identidad visual única y se siente genérica en comparación con otros filmes del género.

En resumen, "Un lugar tranquilo 2" es una decepcionante secuela que no logra estar a la altura de su predecesora. Con una trama predecible, personajes poco desarrollados y falta de suspenso, la película se queda a medio camino de las expectativas generadas. Aunque tiene algunos momentos decentes, en general deja la sensación de haber perdido una oportunidad para continuar la historia de una manera más interesante.