Mucho antes de que se ideara la dramática vivencia a la que se ve sometido el Dr. Richard Kimble en "El fugitivo" como serie y años más tarde llevada al cine, "el mago del suspense" ya presentó una historia parecida: Un falso acusado que debe demostrar su inocencia y descubrir a los culpables. La única diferencia es que, en lugar de su mujer, el asesinado es su amigo.
Hasta aquí, pese a que existen algunos detalles forzados en el guión - propios de un Hitchcock que no había alcanzado todavía su madurez como cineasta -, la trama engancha e incluso se aprecian varias escenas muy bien planificadas. Pero "Sabotaje" tiene un problema con la segunda mitad de la película, donde todo se vuelve más confuso, monótono y es menos trepidante. Asimismo cansa el excesivo "patriotismo americano propagandístico" que se menciona una y otra vez.
Suerte de ese final en un marco cinematográfico tan apropiado que no desvelaré para no destripar el final, y que le hace de nuevo subir la puntuación.
Mi nota: 6,8