Una vez más Statham hace una película de bajo presupuesto. Empieza bien y tiene una trama clásica del cíne de acción: una banda en donde los esbirros se traicionan entre si. Pero enseguida el ritmo decae. Además, aquí Statham, aunque gana las peleas, recibe "la del pulpo". Se pegan dándole puntos toda la película. El papel de Jennifer López es de lo más tonto que se puede ver (incluso en este tipo de películas). No solo no ayuda al protagonista sino que lo pone en situaciones difíciles. Es curioso que no tiene nada de sensualidad su personaje; es evidente que Jennifer está en horas bajas. Es una pena que Statham continue teniendo menos caché que Stallone y Arny; a pesar de su relativa juventud que debería jugar a su favor. Sigo pensando que, a este paso, no va a igualar su exitosa saga de Transporter.