Viendo la película he sentido las mismas sensaciones que viendo a Saitama de One Punch-Man, y no solo porque ambos personajes sean calvos, sino porque buscan criticar a su género y lo más entretenido son los combates. Tengo que aclarar que disfruto bastante más con Saitama porque es más ingenioso con su humor y no se nota tanto el calzador como en Black Adam. Con lo serio que es el personaje se notaba demasiado forzado cuando intentaba hacer chistes.

La película de Black Adam se soporta en su impresionante banda sonora y las escenas de acción, ya que la trama flojea en muchos aspectos. Me lo pasé muy bien en el cine, pero es de esas que en el camino a casa la reflexionas solo sacas fallos, y creo que si la vez en una televisión serían más notable ya que no lograría meterte tanto en la película.

Además, la película introduce personajes muy interesantes y como muchas películas de introducción su antagonista deja bastante que desear. Es que no podemos olvidar que esta película esta protagonizada por un villano de Shazam y su principal rivalidad sería contra él, por lo que darle este enfoque ha resultado ingenioso y te deja con la duda de que ocurrirá cuando se encuentren.

En conclusión, una película que he disfrutado a pesar de tener una trama bastante sencilla porque compensa con una impresionante banda sonora, buenos efectos especiales y un buen reparto de personajes y que finaliza con una escena post-créditos que dará esperanzas a los fans de DC.