Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de David MS:
4
Terror Cuando, tras cien años de confinamiento, Drácula es al fin liberado, se encuentra en un mundo dominado por la tentación y el caos, donde encaja a la perfección: es el siglo XXI. Decide viajar a los Estados Unidos, un lugar perfecto para seducir bellas jóvenes y luchar por la conquista del poder. Pero lo mueve también otra razón: sabe que en algún lugar de Nueva Orleans hay una joven que es la única persona del mundo que comparte su oscuro legado. (FILMAFFINITY) [+]
25 de junio de 2013
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Montador de Wes Craven en siete películas, no sorprende que el debut de Patrick Lussier fuese una producción del director de Pesadilla en Elm Street y Scream. Dracula 2001 es su título, y como hace prever es una adaptación contemporánea de la novela de Bram Stoker, que el mismo Lussier se encargó de plasmar en libreto. Aunque en el momento de su estreno fue un fiasco en taquilla -54 millones de presupuesto, 33 de recaudación en USA- a Lussier nadie le impidió escribir y dirigir un par de secuelas, ambas directas a DVD.

En esas dos partes Patrick Lussier no contó con ningún actor de este Dracula 2001, normal pues aunque en principio parezca una producción de medio pelo, se pasean por ella caras bastante conocidas. Christopher Plummer, Jonny Lee Miller (Trainspotting), Omar Epps (House M.D.), Jennifer Esposito (Summer of Sam), Justine Waddell (The Fall) y un trío de actores que después ganarían cierta relevancia, Shane West (Urgencias), Nathan Fillion (Castle, Firefly) y Gerard Butler (300), éste en el papel de Dracula.

Unos ladrones (Epps, Esposito...) entran en casa de un inmortal Abraham Van Helsing (Plummer) esperando encontrar objetos de valor. Lo que se llevan es un custodiado ataúd en el que Dracula (Butler) duerme por los siglos de los siglos. Como resulta obvio el chupasangre escapa, y se va a New Orleans -en pleno carnaval- a buscar a la hija de Van Helsing (Waddell), a la que trata de convertir en su pareja.

Bastante criticada en su momento, y olvidada hoy, Dracula 2001 es una cara serie B que, la verdad es que siendo mala, contiene un par de ideas atractivas y algún aspecto más a destacar que merece ser apreciado. Esas ideas son la posibilidad de que Dracula sea en realidad un personaje bíblico -que no voy a revelar-, de ahí su miedo a las cruces y su odio hacia la iglesia. El otro matiz de guión que llama la atención es la inmortalidad de Abraham Van Helsing tras infectarse con la sangre del conde transilvano.

Valorar en positivo la inclusión en el reparto de un solvente Christopher Plummer, y la presencia -más que actuación- de Gerard Butler, quien en realidad acaba por ser el típico vampiro ligón y chulopiscinas.

Qué hace de Dracula 2001 un film fallido y algo ridículo: unos diálogos propios del cine porno más amateur, el pésimo reparto que los recita -horrible la protagonista Justine Waddell y Omar Epps-, ciertos efectismos con la cámara bastante anticuados -la cutre cámara rápida-, la inclusión en la película de cada canción que forma parte de la nu metalera banda sonora, incluso el descarado product placement de donde podemos ir a comprarla pues la protagonista trabaja en la sección de discos de Virgin Megastore. Añadir alguna escena de lo peor que se puede ver en el cine de vampiros, como la pelea final a lo Matrix entre la protagonista y Dracula, y el posterior epílogo.
David MS
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow