Película de 1994 que trató de aprovechar el gran boom del legendario videojuego de los años 90, "Street Fighter II The World Warrior", pero que adolece del mismo problema que otras adaptaciones, como "Mortal Kombat" y "Resident Evil", cual es alejarse bastante del contexto original de los personajes en cuanto a sus historias personales y escenarios de lucha.

Y, sin embargo, apartando lo anterior, la película no es tan desastrosa: logra el propósito de entretener y nos regala momentos jocosos que hacen que no sea mala del todo (el "cambia de canal!" de Zangief, memorable).

Van Damme, en su elemento, con sus típicos movimientos de artes marciales. Raúl Juliá, en su penúltimo trabajo antes de su muerte prematura en 1994, cumple en el papel de M. Bison, a pesar de algunas escenas un tanto absurdas, como los "movimientos eléctricos" de la pelea final. Kylie Minogue hace el papel de "Cammy", personaje que no es de la versión original del videojuego ya mencionado, sino del posterior "Super Street Fighter II The New Challengers".

Algunas caracterizaciones de los personajes cumplen dentro de lo que cabe: muy bien logrado el de "Vega" con el actor Jay Tavare, así como Ming-Na Wen con "Chun-Li". No puede decirse lo mismo de "Dhalsim", bastante alejado del original.

El film carece de efectos especiales en los movimientos de lucha de los personajes del videojuego: "Ryu" (con el actor Byron Mann) apenas hace algo parecido a un HaDoKen cuando pelea contra Vega; "Guile" (Van Damme) realiza algo parecido al "Flashkick" en la batalla contra M. Bison. Vega (Tavare) ejecuta en algunos pasajes movimientos del videojuego con su garra.

En fin, película recomendada para entretenerse y pasar el rato, sin grandes pretensiones.