Lamento coincidir con el sector de opinión que al acabar de ver esta película encuentra que tal vez el paso del tiempo ha hecho que su contenido haya perdido interés. Sí, digo que lo lamento porque pensaba que me gustaría más "El planeta salvaje" y me hubiera encantado haberme encontrado con una historia más enlazada, mejor tejida, y es que el peor defecto que encuentro es que la película avanza a trompicones, como dando bofetadas sin avisar.

La temática hoy está exprimida, que el ser humano es una plaga para el planeta Tierra podía parecer un enunciado fantástico en los setenta pero hoy es una realidad que por suerte ya se encuentra aposentada en la conciencia general. Nunca es malo que se alce la voz en favor de un ecologismo racional, y si es a través de una historia que recrea un planeta tan bien inventado pues mejor. Para eso está el cine, para crear alegorías, para ofrecer formas originales de transmitir mensajes. Tal vez lo peor es saber que gentuza como Trump, hoy, escupe ante propuestas verdes y se reiría de películas así.

Sin embargo mi satisfacción es relativa (de ahí mi nota), encuentro que la película avanza a ritmo desigual y desvela información de forma brusca, principalmente en su parte final, que es la más delicada. Si lo normal es elogiar películas breves que cuentan lo mismo que otras en más tiempo, en este caso es todo lo contrario. Tal vez redondear el final con más pausa hubiera sido lo mejor, más calma, menos prisas. Todos sabemos de qué va todo en los primeros minutos. Tal vez merecíamos acabar mejor....