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Voto de Miquel:
8
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77,288
Drama
Madrid. Manuela, una madre soltera, ve morir a su hijo el día en que cumple 17 años, por echarse a correr para conseguir el autógrafo de Huma Rojo, su actriz favorita. Destrozada, Manuela viaja entonces a Barcelona en busca del padre del chico. (FILMAFFINITY)
21 de marzo de 2009
69 de 91 usuarios han encontrado esta crítica útil
Largometraje nº 13 del realizador Pedro Almodóvar (Calzada de Calatrava, Ciudad Real, 1949), escrito y dirigido por él. Se rueda en escenarios naturales de las ciudades de Barcelona, Madrid, A Coruña y El Ferrol y en estudio. Gana un Oscar (película de habla no inglesa), un premio de Cannes (mejor director) y 7 Goya (película, director, actriz...). Producido por Agustín Almodóvar y Michel Ruben para El Deseo, Renn Productions y France 2, se proyecta por primera vez en público el 8-IV-1999 (España, preestreno).
La acción dramática principal tiene lugar en Barcelona en 1998, a lo largo de unos 7 meses, con un epílogo situado 2 años más adelante. Manuela Goifman Echevarría (Roth), de 38 años, madre soltera de Esteban (Azorín), de 17 años, pierde al hijo en un accidente de tráfico. En busca de consuelo y de su antigua pareja, viaja a Barcelona, donde reencuentra a un antiguo amigo convertido en mujer, La Agrado (San Juan), que le presenta a Rosa Sans (Cruz). Poco después conoce personalmente a la actriz Huma Rojo (Paredes) y a su amante Nina (Peña). Más adelante se reencuentra con su antiguo compañero de pareja, convertido en el travestí Lola (Cantó), enfermo terminal. Manuela, enfermera titulada, aficionada al teatro, es una mujer fuerte, con deseos de superación e imbatible por los embates de la vida. Rosa es una monja bondadosa y generosa, que vive dedicada al cuidado de enfermos, toxicómanos y excluidos. Huma aparenta fortaleza, pero es frágil, y arrastra un espíritu triste. Nina lleva una vida sin rumbo y busca refugio en la heroína. La Agrado es sencilla, servicial y de pocas luces. Le gusta hacer agradable la vida de los demás.
El film suma drama y comedia. Desarrolla una historia desgarrada, exagerada y melodramática, que reúne a una galería de mujeres luchadoras, liberadas de viejos prejuicios, comprometidas con la vida, que se relacionan, hablan, luchan, no se rinden, dicen tacos, sobrellevan historias personales dolorosas y se apoyan mutuamente. La vida de las protagonistas está llena de emociones y sentimientos, cuya distribución cubre todo el arco de la sensibilidad humana: alegrías, disgustos, tristeza, melancolía, decepciones, desgarros, dichas, desdichas, afectos, desencuentros, etc., que se combinan con un festivo punteado de humor a cargo, sobre todo, de La Agrado.
El relato se apoya en el sentido trágico de la vida que caracteriza a los trabajos de Almodóvar. En este marco, la vida de las protagonistas palpita, avanza, se renueva, cambia y se afirma a diario con viejas y nuevas razones. El escenario en el que se mueven está comprometido con la realidad. En él conviven drogadicciones, prostitución, sida, transexualismo, amores y celos. La consistencia del relato se basa en las excelentes interpretaciones del elenco de actrices, con actuaciones tan destacadas como las de Cecilia Roth y Marisa Paredes. La obra constituye un hermoso retrato del mundo femenino.
(Sigue en el “spoiler” sin desvelar partes del argumento)
La acción dramática principal tiene lugar en Barcelona en 1998, a lo largo de unos 7 meses, con un epílogo situado 2 años más adelante. Manuela Goifman Echevarría (Roth), de 38 años, madre soltera de Esteban (Azorín), de 17 años, pierde al hijo en un accidente de tráfico. En busca de consuelo y de su antigua pareja, viaja a Barcelona, donde reencuentra a un antiguo amigo convertido en mujer, La Agrado (San Juan), que le presenta a Rosa Sans (Cruz). Poco después conoce personalmente a la actriz Huma Rojo (Paredes) y a su amante Nina (Peña). Más adelante se reencuentra con su antiguo compañero de pareja, convertido en el travestí Lola (Cantó), enfermo terminal. Manuela, enfermera titulada, aficionada al teatro, es una mujer fuerte, con deseos de superación e imbatible por los embates de la vida. Rosa es una monja bondadosa y generosa, que vive dedicada al cuidado de enfermos, toxicómanos y excluidos. Huma aparenta fortaleza, pero es frágil, y arrastra un espíritu triste. Nina lleva una vida sin rumbo y busca refugio en la heroína. La Agrado es sencilla, servicial y de pocas luces. Le gusta hacer agradable la vida de los demás.
El film suma drama y comedia. Desarrolla una historia desgarrada, exagerada y melodramática, que reúne a una galería de mujeres luchadoras, liberadas de viejos prejuicios, comprometidas con la vida, que se relacionan, hablan, luchan, no se rinden, dicen tacos, sobrellevan historias personales dolorosas y se apoyan mutuamente. La vida de las protagonistas está llena de emociones y sentimientos, cuya distribución cubre todo el arco de la sensibilidad humana: alegrías, disgustos, tristeza, melancolía, decepciones, desgarros, dichas, desdichas, afectos, desencuentros, etc., que se combinan con un festivo punteado de humor a cargo, sobre todo, de La Agrado.
El relato se apoya en el sentido trágico de la vida que caracteriza a los trabajos de Almodóvar. En este marco, la vida de las protagonistas palpita, avanza, se renueva, cambia y se afirma a diario con viejas y nuevas razones. El escenario en el que se mueven está comprometido con la realidad. En él conviven drogadicciones, prostitución, sida, transexualismo, amores y celos. La consistencia del relato se basa en las excelentes interpretaciones del elenco de actrices, con actuaciones tan destacadas como las de Cecilia Roth y Marisa Paredes. La obra constituye un hermoso retrato del mundo femenino.
(Sigue en el “spoiler” sin desvelar partes del argumento)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Como es habitual en el mundo almodovariano, todos los personajes son iguales en derechos, dignidad y privilegios. En este universo sólo se observan diferentes funciones personales y de grupo, que encajan en un sistema en el que todos son iguales (nadie goza de privilegios diferenciales) y se relacionan en pie de igualdad. Muestra con naturalidad un mundo en el que la realidad se manifiesta con la diversidad y riqueza de matices que la caracteriza, en especial por lo que respecta al sexo y a las relaciones sexuales. Madres solteras, parejas homosexuales, parejas heterosexuales de hecho, matrimonios convencionales, parejas que se hacen y deshacen, contactos esporádicos, relaciones efímeras, sexo rápido, etc. son figuras que conviven dando testimonio de la realidad plural de la sociedad y de la naturaleza.
No es cierto que la actitud del realizador ante el espectador se inspire en deseos de ofrecerle un documental sobre el submundo de la prostitución callejera nocturna y su entorno. Tampoco pretende dar lecciones de solidaridad y compasión. No define ni aplica juicios éticos o morales. No investiga las causas sociales y económicas de las lacras sociales. No da consejos ni señala pautas de conducta. Muestra como real lo que es real y como normal lo que la sociedad considera normal.
La película contiene numerosos guiños cinéfilos dedicados a films (“Eva al desnudo”, “El hombre elefante”...) y a actrices (Bette Davis, Gena Rowlands, Romy Schneider...). También dedica guiños de simpatía a obras de teatro (“Un tranvía llamado deseo”), dramaturgos (Tennessee Williams), poetas (García Lorca), pintores (Marc Chagall), arquitectos (Gaudí) y una ciudad de edificios espléndidos, como el templo de la Sagrada Familia y otros (Barcelona). Son escenas memorables el parlamento de La Agrado al público del teatro, la visita de Manuela al camerino de Huma, la rueda de coches en el lugar de encuentro de travestidos y clientes, etc.
Rinde homenaje a las mujeres que han representado papeles de actriz en el cine, a todas las mujeres, a la maternidad, al amor de madre, a los hijos, a todas las madres y a su madre, que muere pocos meses después del estreno de la película. El título del film coincide con el del libro manuscrito que el hijo de Manuela concluye poco antes de morir.
La música, de Alberto Iglesias, compone una magnífica banda sonora, de 15 cortes, con predominio de solos de piano y con un tema principal (“Todo sobre mi madre”) que se repite con arreglos diversos. Añade tres canciones espléndidas: “Gorrión” (Saluzzi), “Canción para mi pequeño y lejano pueblo” (Saluzzi) y “Tajabone” (Ismael Lo), que acompaña el viaje en taxi de Manuela a su llegada a Barcelona. La fotografía, de Affonso Beato, en color (eastmancolor), crea una visualidad vibrante, luminosa y colorista, que combina vistosos ocres, naranjas, rojos y azules, un diligente trabajo de cámara y un dibujo muy cuidado que da cuerpo a imágenes de estética recargada y abigarrada.
No es cierto que la actitud del realizador ante el espectador se inspire en deseos de ofrecerle un documental sobre el submundo de la prostitución callejera nocturna y su entorno. Tampoco pretende dar lecciones de solidaridad y compasión. No define ni aplica juicios éticos o morales. No investiga las causas sociales y económicas de las lacras sociales. No da consejos ni señala pautas de conducta. Muestra como real lo que es real y como normal lo que la sociedad considera normal.
La película contiene numerosos guiños cinéfilos dedicados a films (“Eva al desnudo”, “El hombre elefante”...) y a actrices (Bette Davis, Gena Rowlands, Romy Schneider...). También dedica guiños de simpatía a obras de teatro (“Un tranvía llamado deseo”), dramaturgos (Tennessee Williams), poetas (García Lorca), pintores (Marc Chagall), arquitectos (Gaudí) y una ciudad de edificios espléndidos, como el templo de la Sagrada Familia y otros (Barcelona). Son escenas memorables el parlamento de La Agrado al público del teatro, la visita de Manuela al camerino de Huma, la rueda de coches en el lugar de encuentro de travestidos y clientes, etc.
Rinde homenaje a las mujeres que han representado papeles de actriz en el cine, a todas las mujeres, a la maternidad, al amor de madre, a los hijos, a todas las madres y a su madre, que muere pocos meses después del estreno de la película. El título del film coincide con el del libro manuscrito que el hijo de Manuela concluye poco antes de morir.
La música, de Alberto Iglesias, compone una magnífica banda sonora, de 15 cortes, con predominio de solos de piano y con un tema principal (“Todo sobre mi madre”) que se repite con arreglos diversos. Añade tres canciones espléndidas: “Gorrión” (Saluzzi), “Canción para mi pequeño y lejano pueblo” (Saluzzi) y “Tajabone” (Ismael Lo), que acompaña el viaje en taxi de Manuela a su llegada a Barcelona. La fotografía, de Affonso Beato, en color (eastmancolor), crea una visualidad vibrante, luminosa y colorista, que combina vistosos ocres, naranjas, rojos y azules, un diligente trabajo de cámara y un dibujo muy cuidado que da cuerpo a imágenes de estética recargada y abigarrada.