Hay varias escenas predecibles, que yo llamaría tontas (de hecho me pareció largo el metraje para una historia que no lo merecía), pero hay algunas que rayan en lo ridículo: La más cómica, es cuando Statham trata de tranquilizar a un guardia de seguridad que sufre un ataque de pánico durante un atraco. El final es verdaderamente de antología. Hacía mucho no veía algo tan penoso: Jennifer López va a la guarida de los malos, porque sí, porque el guionista la necesita ahí. Típico, ella se pone en riesgo y el héroe la salve. Statham antes de matar al último de los malos tontos, dice una frase (una de las miles del guión que son risibles) pero esta es de marca mayor: “ ¡Se suponía que debías quemar la paja detrás del pabellón del ganado! (Esto lo dice porque no lo hizo como debía y un viejo murió). ¿Pum! ¿Patético!