Tediosa. Pretenciosa. Una discusión que no tiene fin. Me quedé a verla hasta el final por ver cómo terminaba, pero se hace larga y no merece la pena.

Imagínate escuchando a tus vecinos discutir y decir ¡qué pesados! Pues ésto es lo mismo. Monólogo de ella, monólogo de él. Tiene su mérito acordarse del guion, que es bastante complejo y que creo que hace más tediosa la película. Bueno, no lo creo, lo afirmo. Es el guion el culpable de todo.

Vuelvo a decir que el trabajo de Zendaya y Washington merece hasta el último de los dólares que hayan ganado. Están muy bien pese a que sus personajes son cansinos hasta decir basta.

No encuentro aquí las típicas discusiones de pareja. No. No creo que haya gente capaz de aguantar una hora de discusión en bucle, de hecho la casa (que es el único escenario de la película) parece la casa de Gran Hermano, de la que no pueden salir, porque no entiendo cómo no salen antes a que les dé el aire para despejarse de ese ambiente tóxico que se crea, aunque Marie busque crear ese ambiente constantemente y nos torture así hasta la saciedad.

No entiendo tampoco por qué esta rodada en blanco y negro, al igual que "Mank". Será que está de moda.

La he aprobado por ellos. Solamente por ellos.