Hay actores y actrices que tienen el don de no dejar indiferente. Especialmente, en papeles cómicos, es un condicionante brutal, o te ganan con cualquiera de sus peculiares gestos... o por el contrario, te entran ganas de pegarle un zapatazo a la pantalla de televisión. Y Adam Sandler, con ese particular estilo de andar por caso y con una calma que desespera, no es precisamente la excepción a esta norma.

Steven Brill dirige un remake de un clásico que plantea una historia digna de Frank Capra... aunque sin Frank Capra, lo cual es muy poderosa desventaja. El encantador e irresistible magnetismo de Mr.Deeds pasará desapercibido para muchos espectadores, pero algo tendrá el agua cuando tanto la bendicen, pero, como atinadamente afirman críticas previas, ni siquiera funciona la química con Winona Ryder.

Este chico provinciano de buen corazón y caballero rural sin espada, va deshaciendo entuertos, destacando algún secundario de nivel (los peculiares pero siempre talentosos Steve Buscemi y John Turturro), aunque los gags se van sucediendo en un marco previsible y que no permite mucho lugar a la imaginación.

Mr. Deeds está fabricada en exclusiva para los fans de su protagonista.