Black Butler: Book of the Atlantic

Película que sigue a Black Butler: Book of Circus y precede la segunda temporada del anime, manteniendo la misma calidad que toda la saga tanto en animación, guión e historia, y que queda abierto un seguimiento del personaje de Undertaker en obras posteriores, mostrado a lo largo de toda la aventura con pequeñas apariciones y mostrándose aquí su verdadera esencia que, aunque algo predecible, resulta chocante y esclarecedor el móvil y el poco trasfondo psicológico que se deja ver para, probablemente, volver a ahondar en él, como he dicho, en obras consiguientes. Este episodio resulta crucial ya que permite saber al espectador el verdadero ser de muchos personajes con extrema importancia, como es el pasado de Sebastian y el inicio de su relación con Ciel y el trauma que le provocó este último a Elizabeth Midford por una desafortunada frase que hizo esconder durante toda la franquicia su auténtica virtud: el don con la espada, lo cual resulta un giro de los acontecimientos tan brusco como oportuno en la situación que se presenta. Cabe recalcar cómo Noriyuki Abe conmemora llegando incluso a la burla a Titanic, la superproducción de James Cameron, con momentos que sirven para aliviar la tensión argumental usando a los dos personajes cómicos, también habituales en el resto de la serie; Grell Sutcliff y Ronald Knox. El director y guionista han sabido con creces y mucha espectacularidad transformar con esta cinta el género de la saga que, aún teniendo momentos de terror no llegaba a serlo, al contrario que aquí, transfromándola en una obra del subgénero zombi respaldado por elementos sobrenaturales como es el shinigami principal de la obra. Me ha faltado, quizás, una banda sonora clásica y elegante, como ha estado presente de una forma sublime en toda la odisea, así como aprovechar el personaje de Snake, que queda en un plano absurdamente alejado durante todo el metraje pudiendo haber dado bastante más de sí tanto en Book of Circus como en este film, aunque, viéndolo de una forma pragmática, no hace más que ocupar el papel de Pluto en la primera temporada. En resumen, es una obra que mantiene la calidad dándola a su vez un vuelco de género que se siente como un soplo de aire fresco y que, para sus fanáticos, es un divertimento asegurado. (8.5).