Entretenida película que sorprende desde el primer momento. Un hombre encarcelado injustamente emprende su particular venganza, emulando al Conde de Montecristo. Sólo que quiere también sembrar el terror entre sus verdugos y no duda en jugar con su cordura.

El guión es original, bien hilvanado y se van aclarando los hechos poco a poco. Mientras, el protagonista se esconde en las casas y traza mil ardides para lograr sus fugas. Buena intriga que se va desarrollando y aclarando poco a poco. Descripción interesante de la Suecia rural y de sus miserias.
Las escenas de acción al escapar del manicomio son muy buenas: trepidantes, emocionantes y bastante creíbles.

Las actuaciones son muy buenas en general. Von Sydow convence con la frialdad de su mirada.

El ritmo es lento para el gusto actual pero es una gran película con el sabor de la aventura y venganza clásica. El final inesperado te hace pensar en un desenlace de novela detectivesca.