Había leído muy buenas críticas de esta peli, pero lo que me encontré no me satisfizo. Para empezar, me resulta increible el inicio: una señora parece felizmente enamorada de su pareja, pero ve a un mocetón masai y, de repente, se enamora perdidamente hasta el punto de dejar que su pareja se vuelva a su país, quedándose absolutamente sola en un país muy extraño para ella. Uno puede pensar que es amor a primera vista, cosa en la que yo no creo, así que sigamos. La señora consigue encontrar a su mocetón y mantiene con él una insatisfactoria relación sexual. ¡Y para eso trastoca toda su vida! Pues parece que sí, pues la señora sigue empecinada en permanecer con su Adonis. La historia avanza sin que veamos realmente una historia de amor, pues el masai, de cuyo nombre no me acuerdo, en ningún momento enamora a su amada con gestos, atenciones, caricias, comprensión.
Tampoco es que se plasme a la perfección las diferencias culturales, pues, al final, lo que marca el fin de la historia es algo profundamente occidental y que no diré por si alguien no la ha visto.