Siempre he dicho que "Pretty Woman", "Ghost", "El Diario de Noah" y ahora "50 Sombras de Gray" son de una u otra forma, el paradigma femenino. Si le preguntas a cualquier tía cuál es su película favorita, el 98'9% te responderá con un convencimiento abisal, que una de esas pelis, (si no las tres) son las mejores películas de todo el firmamento y más allá. Cualquier otra propuesta es de frikis, misóginos o simples, (con esas mismas palabras fui tildado por recomendar "Antes del Amancer", O_O)

Sólo hay que leer algo de Charles Dickens o las hermanas Brönte para entender que el Romanticismo nació en los países de la Industrialización, donde era típico que un caballero joven tuviera que arrejuntarse con alguna mujer de mediana edad para aunar patrimonio. El problema que se planteaba era la imposibilidad de concebir un fermoso garzón capaz de perpetuar la heredad. ¿Cuál fue el invento? Una vez al año salían estos caballeros con notitas de amor y un gajo de uvas con las que engatusaban a niñas de 12 ó 13 años, a las que violaban y dejaban preñadas, para luego robarles el retoño. A eso hoy se le llama "San Valentín", (ya se sabe que todo santo, antes de serlo, ha sido un hijo de puta de mucho cuidado)

No estoy en contra de las prostitutas, son seres humanos que por avatares de la vida, deben someterse a una "violación consentida", pero Pretty Woman es la culminación del "todo vale": una señora puta en su primer día de trabajo se topa con un pánfilo adinerado hasta los huevos de si mismo, que encuentra en la puta, una manera de recuperar su lado más "humano".

Una película en la que para reflejar la felicidad, ésta tiene que venir servida por un millonario sin capacidad expresiva, y la señora puta, para ser su mujer, tiene que aprender clase. Me parece un auténtico despropósito lobotomizador. La clase no te la da el dinero, te la da el sentido común a la hora de vestir, comer, beber y follar.

Es una versión infantil de "My Fair Lady" impregnada de los mismos valores de cualquier película de Antonio Adamo o Salieri.