Partiendo de la base de que no me atraen los films futuristas ni relacionados con IAs, me anime a ver Her por la buena crítica que tiene. Y bien, he esperado 10 años a verla… del año 2013 y claramente adelantada a su época, pues durante esta década parece que la realidad nos acerca más a lo que la cinta propone, da bastante miedo.
No deja de ser una crítica social pero contanda de forma inteligente, delicada y a la vez muuuuy profunda, llegando a ser intensa, dejando a la vista la vulnerabilidad humana.

Spike Jonce propone un futuro utópico y cada vez más deshumanizado, ligado de una forma muy sólida al mundo digital, tanto tanto que es posible enamorarse de una máquina y viceversa, pero a su vez alarmantemente posible.

Te hace reflexionar, abordando la complejidad de las relaciones humanas y como creamos conexiones sentimentales desde las experiencias y recuerdos. Recordándonos que la mente humana es inmensa, ya que propone que no es necesario un cuerpo físico para sentir emociones intensas.
Al mismo tiempo deja la incógnita del desconocimiento a cerca de los límites en una IA, ¿hasta donde puede llegar una “conciencia” artificial?

Como protagonista… eh espera un momento, ¿es Joaquin Phoenix? Me costo mucho reconocerlo! absolutamente brillante, consigue camuflarse en su peculiar y melancólico personaje Theodore, emanando ternura por cada poro, inteligencia e ilusión, cayendo uno a uno en los errores humanos en los que te verás representado.

Y es que todo encaja y fluye en armonía entre increíbles diálogos cargados de filosofía actual, a través de los cuales se expone la intimidad del protagonista no dejando nada a la imaginación, haciéndote pensar fuera de tus propios límites. Es verdad que quizá hubo algunos momentos dilatados en exceso y que se optó por dar ese mítico “toque piruleta” futurista, en cuanto a escenario y vestuario, pero el peso de los diálogos harán que olvides el resto.

Sin lugar a dudas un acierto asegurado para cualquier humano estándar del 2023!