Kill Game es una película de bajo presupuesto que busca ser un slasher hecho a la antigua como muchos otros que tuvieron un gran recibimiento en la década de los 80 y 90. Usa algunos de los típicos clichés de un slasher cualquiera narrando una evidente historia de venganza. La película es predecible, pero termina generando dudas al final con respecto a la identidad del asesino. Los efectos especiales son claramente de bajo presupuesto, pero las escenas de muerte son prometedoras. De todos los personajes presentes, Beth sobreactúa bastante. El guion logra narrar una historia de asesinos prometedora, pero nada que no se haya visto en otros slashers. Kill Game es solo otra película más del montón que logra ser un slasher entretenido, pero no aporta nada nuevo a las películas de este subgénero. Mi calificación final para esta película es un 6/10.