Un vistazo detrás del origen de la popular obra literaria de Winnie The Pooh, la película narra una conmovedora historia de un padre traumatizado por sus vivencias en la primera guerra mundial que logra superar todo gracias a su pequeño hijo y hallar la felicidad. Vemos una dulce historia de la relación entre Milne y su hijo y como lo ha llevado eso a escribir su obra más popular hasta la fecha. Pero está claro que toda obra popular requiere de un sacrificio y en este caso, se trata de la infancia del pequeño Christopher. Vemos como el niño consigue todo lo que un niño podría soñar, pero muchas veces la fama es un peso demasiado grande para un niño que aún no conoce mucho sobre el mundo. La película resume bastante la historia y había mucho más que ver acerca de la dura infancia que Christopher tuvo debido al peso de la fama. De igual modo se las arregla para ser un drama conmovedor. Las actuaciones, el vestuario y toda la producción son admirables, logrando recrear algunos de los eventos sobre la infancia de Christopher y su relación con su padre. Goodbye Christopher Robin es una buena película dramática que no necesita ser vista con los ojos, sino con el corazón. Mi calificación final para esta película es un 9/10.