Todo parte de un colosal atentado que en el día del discurso de la Nación, acaba con el Capitolio Americano, y con él con el Presidente de los USA, todos los congresistas, jueces del TS y demás fuerzas vivas del país. Bueno, todos no, excepto uno, al cual por motivos de seguridad no se le permite acudir al evento, y al que se le denomina "El superviviente designado" (no el sucesor, por Dios !).

La clave de bóveda de esta serie es plantear como un político sin grandes aspiraciones (Secretario de Urbanismo) y ...sorprendentemente... empapado de una ética y moral casi intachables, se encuentra sin quererlo ni beberlo sentado en el despacho oval, intentando capear una amenaza terrorista sin parangón, revueltas internas de sus Gobernadores en el interior, la consiguiente crisis familiar, etc.

Dicha premisa podría haber dado a lugar a una serie de altura, con un guión más realista y que cayese en menos tópicos. Sin embargo, el resultado es algo decepcionante. La serie mantiene el interés pero acaba degenerando en una especie de CSI (en busca del autor de los atentados) salpicado por continuas minicrisis que son salvadas por el protagonista, que hace un buen papel. Sin embargo el reparto coral es pobre (parece que no existe nadie más en el Gobierno que el Presidente, su Secretario de Gabinete, su Asesora y su Jefe de Prensa, por muy precario que sea dicho Gobierno. Ni acuden las cabezas pensantes del país, ni miembros de otros gobiernos federales con más experiencia... Ellos solos se lo comen y se lo guisan. La ambientación y fotografía es bastante normalita. Los efectos especiales del Capitolio semiderruido son bastante flojos, juntando algunos bloques de hormigón y cascotes en primer plano, con unos horribles restos de fuego por aquí y por allá que a todas luces se nota que se trata de espitas generadas por gas...

En fin, una serie que podríahaber dado de más