De los capítulos que tiene Black Mirror, este White Bear es uno de los más truculentos. Manipulación completa para el disfrute del público sediento de ideas y de historias como estas. Seguramente, como me ha pasado a mí, la disfrutarás en dos ocasiones. La primera para seguir el orden de una narración en la que queda situación está controlada y uno va entendiendo la crítica a la hipnosis de la gente, la parsimonia de los que están rodeando la vida de los que han salido de la caverna y se muestran como protagonistas de la historia.
La segunda, no menos interesante, la repetimos para ver cómo cambian los protagonistas. Ahora contemplamos a los contempladores y vemos a quienes "salieron de la caverna" como medidas fichas de un juego mental altamente macabro.