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Paco Ortega rating:
6
Drama Set on a fictional Latin American island, the action starts when Gov. Vargas (Miguel Angle Ferriz) is assassinated. His executive secretary Ramon Vasquez (Gerard Phillipe who died during production) is then forced to temporarily assume the mantle of power. After the new, brutal, and sadistic governor (Jean Servais) takes over, conditions steadily deteriorate. Meanwhile, the widow of the former governor, Inez Vargas (Maria Felix), and Ramon have fallen in love. [+]
Language of the review:
  • es
February 21, 2009
2 of 2 users found this review helpful
Es una película alimenticia. Tiene elementos de interés, pero en general termina siendo bastante aburrida. En cualquier caso, tiene una factura correcta y los actores cumplen sobradamente. En especial es llamativa la participación de Gerard Philipe, el icono del teatro francés contemporáneo, en el personaje protagonista: un hombre que sufre en sus carnes las contradicciones del poder y que debe tomar decisiones que chocan de manera frontal con sus convicciones.

Este aspecto es, tal vez, el que más entronca con el resto de la filmografía de Buñuel: Nazarín, Viridiana y muchos otros son seres que se pelean con las condiciones generales de la sociedad en la que viven, las costumbres brutales, los regímenes políticos injustos, etc. El denominador común es que salen siempre escaldados, sin haber cumplido sus objetivos y causando de manera involuntaria todavía más daño a su alrededor.

En realidad estamos ante un drama pasional sin demasiada fuerza en el contexto de una reflexión bastante epidérmica sobre la violencia y las corruptelas que acompañan a las dictaduras latinoamericanas. En este caso la establecida en Ojeda, un país imaginario. De vez en cuando aparecen anacronismos, como por ejemplo esa inefable corrida de toros a la que asisten dos personajes y que se nota a la legua que no tiene nada que ver con el conjunto general.

Formalmente la película supone un paréntesis. No hay ni rastro del lenguaje propio, de los gestos ni de las obsesiones de Buñuel. Hay solo oficio, faltaría más, un guión discutible y un trabajo cinematográfico que no agranda la imagen del maestro aragonés.
Paco Ortega
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