Qué se aparte "The disaster artist" y que se haga a un lado James Franco. "50 sombras liberadas" es el culmen del sueño húmedo de una fan de "Crepúsculo". La trilogía ¿romántica/erótica? finaliza de manera extraordinaria subiendo peldaños. Si antes era una bazofia, ahora es un mal thriller de acción con melodrama barato de por medio.

Jamie Dornan sigue tan inexpresivo como siempre. Por otro lado, es de agradecer que Dakota Johnson ponga algo más de esmero en su personaje, resultado apenas divertido. Si hay que destacar algún personaje, destacaría sin dudas la revelación actoral del año: el Audi R8 Spyder.

Prepárate para acompañar a R8 en la escena más trepidante, enfermiza y provocativa de la saga (no, no es una escena de sexo en coche), donde Ana conduce a R8 por la autopista a toda hostia en una persecución como una auténtica lunática, con Grey gritando "¡más despacio!" (Ahora te toca a tí, encanto) y con Ana desatada pitando a la señora del coche de enfrente que no les deja pasar por la autopista.

¡Ah, si!. Me estoy yendo por otros carriles ( R8 y yo recogemos el fajo que nos han pasado debajo de la puerta la junta directiva detrás del film). Creo que no puedo decir mucho más sin entrar en spoilers, pero si decir que es la guinda del pastel a esta repostería de pastelosas situaciones, de mensajes machistas, de la estupidez del ser humano, la triste verdad acerca de los gustos de cierto sector de mujeres (muchas, al ver las cifras de taquilla).