Es sorprendente, para empezar lo largo de la historia y sin embargo lo corto que se hace, prueba inequivoca de que es interesante y entretiene. El principio es narrativo, explicativo, dónde nos narran dos historias, el presente y el pasado, hasta llegar al presente actual.

Y ahí está la genial interpretación de Kidman, y no menos buena de Law, buenísimos los dos. Pero hasta que llega el eclipse de Zellweger, que aquí lo borda; mira que en su día no me gustó EL DIARIO DE...., pero me la voy a tener que volver a ver porque puede ser que descubra cositas nuevas. Recomiendo que ahí lo pongan en V.O., puesto que el doblaje deja mucho que desear. Su papel requiere una forma de hablar brusca, que en el doblaje no alcanza.

Y tenemos un desarrollo de la historia en el que no te esperas ninguno de los giros que puedan suceder, con una fidelidad mutua, y con mucho hijo de puta que luego eexplicaré.

El desenlace es la obra maestra, me encanta, puesto que no es lo que te esperas, pero si es lo más natural.

Disfruten, puesto que esta es una de esas cintas que no se olvidan facilmente.