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Micronesia Micronesia · Freedonia
Rufus T Firefly rating:
9
TV Series. Drama TV Series (2017-Present Day). 5 Seasons. 56 Episodes. In a dystopian near-future, the totalitarian and Christian fundamentalist government of Gilead rules the former United States amidst an ongoing civil war. Society is organized along a new, militarized, hierarchical regime of Bible-inspired social and religious fanaticism and newly-created social classes, in which women are brutally subjugated, and by law are not allowed to work, own ... [+]
Language of the review:
  • es
April 28, 2017
202 of 317 users found this review helpful
Magnífica adaptación de la novela El cuento de la criada de Margaret Atwood. Esta serie no tiene nada que ver con la fallida adaptación alemana de los años noventa. Treinta años han pasado desde que la escritora canadiense imaginara un futuro donde EEUU estuviera gobernado por una teocracia y lo que entonces parecía ciencia ficción hoy parece cada vez una posibilidad más real. No vamos a hablar del Islam, la Sharia o el Califato, donde el mundo que pintaba Margaret en su novela existe ya. Ella apuntaba al corazón de la democracia occidental. Bienvenidos a los Estados Unidos de los Amish.

Narrada en dos planos temporales distintos, por una lado tenemos a Defred, ya convertida en esclava sexual de uno de los comandantes (dirigentes) de la teocracia que ha derribado a la democracia y por otro lado tenemos a Defred cuando aún era June y a través de sus ojos vamos a ver cómo los fundamentalistas cristianos (que me perdonen los Amish por haberlos usado en mi anterior comparación) van a ir poco a poco a hacerse con el poder. Tras presentarse como los salvadores después un atentado en el Congreso, van a establecer su ley. Su ley quiere decir la ley de la Biblia y más concretamente la interpretación "surrealista" que ellos hacen de las Sagradas Escrituras. Porque que un don nadie viole a una mujer merece la horca, pero que uno de sus dirigentes viole a una de las esclavas sexuales con fines reproductivos, venía en "su" Biblia.

Porque ese es el punto de partida. La contaminación ha hecho que sean pocas las mujeres que logren dar a luz a niños sanos. Estos fundamentalistas van a aprovecharse de la situación para hablar de una vuelta a las tradiciones. Un mundo donde la ciencia o la universidad o la cultura o incluso las religiones cristianas que no comulguen con su visión del cristianismo están prohibidas y perseguidas. Un mundo donde la mujer ha sido relegada a un papel secundario, sin poder trabajar o poseer propiedades.

Aunque el peso inicial recae en la actriz Elisabeth Moss, con el paso de los capítulos ganan peso otros personajes. Curiosamente todos femeninos, Desde Yvonne Strahovski, la mujer del comandante Fred Waterford, el dueño de De-Fred. con su mezcla de celos, hipocresía y fascinación por el poder, pasando por otra de las esclavas sexuales, Of-Glen, (Alexis Bledel) personaje rebelde que a partir del tercer capítulo coge un vuelo espectacular y terminando por la tía Lydia (Ann Down) la mujer (la bestia) que dirige la Casa Roja, donde se doblega la voluntad de las mujeres para que acepten ser esclavas reproductivas, como si fueran animales.

La serie es buenísima, pero no seria ni la mitad de buena sin el papelazo que se marca Elisabeth Moss. Madre mía que capacidad tiene esta actriz para trasmitir emociones contenidas. No habla mucho, aunque a veces oímos sus pensamientos, pero lo dice todo con esa mirada que expresa a la vez ira, miedo, frustración, asco, algunos destellos de orgullo y una chispa muy, muy escondida de esperanza en poder reencontrarse con su hija, único motivo para que siga viva. Después de haber sido Peggy Olson en Mad Men, la actriz se marca el papel de su vida. Tras haber visto Feud, creía que Jessica Lange o Susan Sarandon se merecían todos los premios del año. Rectifico. Elisabeth Moss acaba de adelantarlas por la derecha.

Aunque los mejores personajes sean femeninos, esta distopia no es una excusa para presentarnos a la ya habitual heroína de medio pelo que viene a salvar el mundo. De-Fred bastante tiene con salvarse así misma. El libro fue una denuncia de la posible deriva hacia la que caminaba la humanidad en 1985. 32 años después ese mundo ya existe en algunas partes y en otras a muchos les gustaría que existiera. Serie denuncia que capta a la perfección el espíritu de una de mis novelas favoritas de su género.
Rufus T Firefly
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