La falta de imaginación de los guionistas de Hollywood dedicados al género del terror empieza a resultar, ya, decadente. "Reeker" es una película (o no) que mezcla muy torpemente elementos de las historias de zombies de George A. Romero con todos los tópicos del tipo "Viernes 13" o "Halloween" y las road movies, donde uno no sabe muy bien por qué suceden las cosas ni qué línea argumental sigue el relato. La película es totalmente inverosímil, porque una cosa es plantear una intriga desde un punto de vista ficticio-fantástico, donde se aceptan elementos irreales y otra muy distinta que aparezca un ser sobrenatural al que le afecten las armas terrenales y que nunca se vea demasiado bien para así no gastar excesivo dinero en efectos especiales. Dave Payne plagia descaradamente cada minuto del metraje, hasta el punto de que el final está copiado casi literalmente de un film francés de 2003 del que no diré el título para no desvelar el desenlace, pero que obviamente obedece a la necesidad del mediocre director de explicar de alguna manera toda la trama. En una palabra: patética.