Interesante historia la de un grupo de turistas americanos, que van a pasar unos días de vacaciones a las paradisíacas playas de Cancún (México).
En un principio, podemos ver la envidia (sana) que nos produce verlos todo el día tumbados a la bartola, disfrutando del sol y los cócteles fresquitos cargados de alcohol.
En compañía de sus parejas, esta serie de escenas encadenadas, nos puede recordar a un par de parejas de recién casados, disfrutando allí de su luna de miel.
Sin embargo, la historia es otra. Tras la pequeña introducción vacacional, la película adopta ya la clásica historia de cuatro jóvenes norte-americanos con muchas ganas de diversión. Podría haber pasado perfectamente por una historia de adolescentes, que se van a la frontera de México, en busca de diversión y marihuana para vender de vuelta a casa, haciéndose así con unos generosos beneficios clandestinos, gracias a su paso por la frontera, como se puede ver en películas como Borderland, donde la diversión desenfrenada se convierte pronto en una experiencia traumatica. Nada mas lejos de la realidad. Pues el destino quiso que los cuatro jóvenes conocieran a un joven y callado alemán, proponiendoles una excitante aventura hacia unas ruinas abandonadas y eliminadas de los mapas.
Lo misterioso de su ubicación, y el empeño del joven alemán en ir al encuentro de un grupo de arqueólogos que fueron allí a investigar, hacen que se aventuren en una misión casi imposible. A pesar de la negativa de ir de una de las chicas del grupo, al final acaban cayendo en la tentación de una aventura que nunca tendría que haberse producido.
¿Serás lo suficientemente atrevido para acompañarles en su búsqueda y averiguar lo que esconden esas misteriosas ruinas?. Quizás ya te picó la curiosidad sin saberlo. Lo excitante de esta película es viajar con sus protagonistas hacia ese lugar y descubrir lo que allí se esconde. Puede que la aventura te sorprenda mas de lo que imaginas.