Quiero comenzar diciendo que no he tenido la oportunidad de leer la novela de Green, de hecho fue una increíble coincidencia, bueno no creo en el azar y Dios no juega a los dados; disfrutar esta película fue un designio de algo que escapa de mis manos porque ni sabía cómo se llamaba, ni conocía como se llamaba la actriz, lo único de lo que me percate fue que al final de la misma mi rostro eran ríos de lágrimas.

Existe mucho prejuicio en films de esta índole quizás porque siempre es lo mismo o tal vez porque es puro sexo juvenil, o como diría mi viejo “nada pura” bueno, el chiste es que cuando la termine de ver se la recomendé a mi señor lo primero que me dijo fue “es muy pura”, y aunque parezca raro por primera vez concorde con él; “The Fault in Our Stars” es puro encanto, mucha pureza y lágrimas en exceso. Es el cálido y bello dibujo del amor juvenil del que solo una buena película puede dar, entender cada dialogo y ver cada fotograma es pura poesía contemporánea.

Enseguida de terminar de ver la película mi mejor amigo “Google” y yo nos pusimos a trabajar y a recopilar mucha información y fotos también de una joven, talentosa y bella mujer llamada Shailene Woodley (previamente buscada en Filmaffinity), la actuación de ella es tan increíble como creíble porque aunque suene paradójico las actuaciones por mas hazañas fantásticas que realicen, por más disparos que esquiven tienen que ser creíbles, tienen que ser originales en otras palabras las grandes actrices poseen personalidad y Woodley tiene personalidad sumado al talento necesario y a un gran deseo de triunfar la convierten a mi gusto en una futura gran estrella.

Ansel Elgort hace un trabajo aceptable siempre opacado por la brillantez de Woodley pero tiene lo necesario y hace lo justo y lo correcto para relacionarse de tal manera que el público pensase de que incluso en la vida real son novios, desarrollan una química notable, pero insisto Elgort en esta película es opacado por nuestra joven actriz en todo momento pero eso no es muy malo de él, sino que el trabajo de ella fue muy bueno.

“The Fault in Our Stars” es amor juvenil puro en su esencia más encantadora, un deleite de buen cine moderno, buena música y una increíble performance aparte de unas cuantas lagrimas hacen y corroboran que todavía el cine de calidad logra prevalecer y crear los sentimientos más sinceros en nosotros los débiles por las buenas películas.