Click here to copy URL
Spain Spain · Barcelona
manulynk rating:
6
Western. Comedy Spaghetti-Western star Terence Hill achieved international fame with 1974's My Name Is Nobody. A soldier of fortune, Nobody (Hill) is hired to gun down veteran outlaw Jack Beauregard (Henry Fonda). Before long, however, Nobody and Beauregard are bosom companions. When Beauregard announces his retirement, Nobody insists that the old man go out in one last, glorious shooting spree and tries to arrange for this to happen. The film was cut ... [+]
Language of the review:
  • es
August 3, 2011
1 of 1 users found this review helpful
Pese a que el último western de Leone fue “Hasta que llegó su hora”, es inevitable pensar en el director a los pocos segundos de iniciado el metraje, y es que el inicio es extremadamente parecido a “El bueno, el feo, el malo”. La presencia de Henry Fonda y la música de Ennio Morricone dan muchas pistas. Lo único que descuadra es la presencia de Terence Hill repitiendo el cliché de Trinidad que tan famoso le hiciera.

En realidad el parecido no es en modo alguno casual y es que aunque Leone no aparece acreditado en este film, tuvo un papel destacado en su gestación pese a que el firmante final del film sea Tonino Valerii que fue aydante de dirección del propio Leone. De hecho, es posible que este film fuera uno de los borradores de “Hasta que llegó su hora”, ya que mantiene ciertas similitudes argumentales. Aquí Fonda interpreta prácticamente al mismo personaje, un maduro pistolero cansado de deambular por estos mundos, que se ve perseguido por una especie de “angel de la guarda”, o más bien diablo que quiere obligarle a enfrentarse a un ejército de pistoleros conocido como “la banda de los salvajes”.

El film tiene dos partes claramente diferenciadas: la “seria”, protagonizada por el personaje de Henry Fonda, que da vida al típico arquetipo de pistolero maduro, y la “cómica”, con el personaje de Terence Hill que repite el cliché cómico de Trinidad, un pistolero rápido y talentoso y más bien juguetón. De alguna forma, en la mitad protagonizada por Fonda vemos el llamado “western crepuscular” con claras referencias a Peckinpah como el uso del ralentí e incluso alguna mención mucho más explícita. En esta parte, la más interesante de largo se reflexiona sobre el fin de una forma de vida: la de los pistoleros, cuyo mundo no sólo ha cambiado sino que además está desapareciendo ante sus propios ojos.

La parte, digamos, cómica no tiene apenas interés, y no es más que un compendio de situaciones que los seguidores de la pareja Terence Hill y Bud Spencer le sonará mucho. Es bastante complicado enlazar las dos partes en las que se divide el film, por cuanto si bien la del pistolero interpretado por Fonda está bastante bien resuelta, la de Hill apenas tiene mayor sentido que la de desmitificar lo más sagrado, y de paso alargar innecesariamente el film.

Se puede ver el film como una alegoria al mito del pistolero, entendido como una rueda interminable en la que un pistolero famoso es abatado por un desconocido (por un “don nadie” o en este caso por “ninguno”), el cual pasa a ursurpar la fama hasta que, a su vez, llegue otro pistolero anónimo en busca de la fama, y así sucesivamente. Sin embargo, por muy buenas ideas que parezca ofrecernos este film, lo cierto es que el resultado es muy irregular, en la que las escenas que nos recuerdan al mejor Leone, acaban pesando menos que el resto de escenas con mayoritaria presencia del “payaso” Hill.
manulynk
Did you find this review interesting and/or helpful?
arrow