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Izeta rating:
8
![](https://filmaffinity.com/images/myratings/8.png)
Drama
Steve Cochran plays the slick, debonair owner of a notorious gossip magazine who is anxious to break a big scandal to reverse a recent decline in sales. He zeroes in on children's entertainer Van Johnson, a decent, stand-up guy who nonetheless has a secret in his past which would most likely end his suddenly flourishing television career if found out. Johnson can save himself and his wife Ann Blyth and son from disrepute if he "trades" ... [+]
Language of the review:
- es
May 2, 2020
5 of 5 users found this review helpful
Estupenda y feroz crítica a determinado periodismo o revistas del " corazón" ( es muy gracioso que se autodenominen así), cuyo " servicio" a la ciudadanía consiste en mercadear con las miserias ajenas y proporcionar la carnaza que el respetable público necesita para satisfacer su sed de morbo y chismorreo.
Como, hoy en día, la exhibición, voluntaria o no, de toda clase de lodo y mierda es el pan nuestro de cada día y nosotros los comensales que degustamos con fruición tan exquisitos platos como si fueran auténticas delicatessen, no nos va a sorprender ni escandalizar lo que vemos en este film, pero la película plantea algunas cuestiones que me han resultado muy interesantes.
Una, es el personaje que encarna Steve Cochran.
Responsable de la revista en cuestión, es un despiadado hombre sin escrúpulos que indaga en las vidas de personas de interés público, buscando siempre el error, la debilidad o el paso en falso, que cualquier persona guarda en su interior para poder adornar sus primeras planas y aumentar su tirada nacional.
Una sabandija, que se alimenta de la sangre de los demás e invita a los lectores, previo pago de un centavo, a compartir tan delicioso banquete.
Me ha resultado muy curioso, cómo justifica su labor argumentando que él, sólo vende " la verdad".
Qué rápido encontramos razones que calmen a nuestra conciencia... Como es " la verdad", no hay nada de malo en publicarla, no hay calumnia ni difamación, y yo puedo venderlo y consumirlo tranquilo ! Qué bien!.
Nadie se plantea lo cruel que puede ser publicar " la verdad", las consecuencias que le pueden reportar a una persona cuya debilidad ha sido expuesta. ! Qué asco!. Y como, hoy en día, algunas de las personas se exponen voluntariamente, yo no me planteo nada más. No soy responsable de lo que hagan los demás con su vida y punto.
! A consumir alegremente la mierda que nos arrojan a la cara!. ( spoiler)
! No me voy a plantear nada más!. ! No pienso cuestionarme las consecuencias que estas revelaciones pueden tener en la vida de una persona!.
Como, hoy en día, la exhibición, voluntaria o no, de toda clase de lodo y mierda es el pan nuestro de cada día y nosotros los comensales que degustamos con fruición tan exquisitos platos como si fueran auténticas delicatessen, no nos va a sorprender ni escandalizar lo que vemos en este film, pero la película plantea algunas cuestiones que me han resultado muy interesantes.
Una, es el personaje que encarna Steve Cochran.
Responsable de la revista en cuestión, es un despiadado hombre sin escrúpulos que indaga en las vidas de personas de interés público, buscando siempre el error, la debilidad o el paso en falso, que cualquier persona guarda en su interior para poder adornar sus primeras planas y aumentar su tirada nacional.
Una sabandija, que se alimenta de la sangre de los demás e invita a los lectores, previo pago de un centavo, a compartir tan delicioso banquete.
Me ha resultado muy curioso, cómo justifica su labor argumentando que él, sólo vende " la verdad".
Qué rápido encontramos razones que calmen a nuestra conciencia... Como es " la verdad", no hay nada de malo en publicarla, no hay calumnia ni difamación, y yo puedo venderlo y consumirlo tranquilo ! Qué bien!.
Nadie se plantea lo cruel que puede ser publicar " la verdad", las consecuencias que le pueden reportar a una persona cuya debilidad ha sido expuesta. ! Qué asco!. Y como, hoy en día, algunas de las personas se exponen voluntariamente, yo no me planteo nada más. No soy responsable de lo que hagan los demás con su vida y punto.
! A consumir alegremente la mierda que nos arrojan a la cara!. ( spoiler)
! No me voy a plantear nada más!. ! No pienso cuestionarme las consecuencias que estas revelaciones pueden tener en la vida de una persona!.
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details.
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Spoiler:
La otra cuestión que me ha resultado muy interesante es la que plantea el personaje de Ann Blyth.
Encarna a la mujer del famoso que se ve amenazado por la publicación. Él no es el verdadero objetivo del punto de mira del director de la publicación. En realidad, es el instrumento del chantaje que le realiza para tener acceso a otro personaje más famoso, cuya vida es de más interés público, una estrella de cine.
El chantajeado Van Johnson, conoce un secreto íntimo de la vida de esa actriz y, o revela ese secreto, o verá publicado el suyo propio y su incipiente carrera se irá a la mierda.
Él es íntegro y no querrá acceder al chantaje. Pero su mujer no lo tendrá tan claro y se enfrentará a su marido por poner en peligro la estabilidad y la paz de su hogar y de su hijo.
Un final que no voy a revelar, significará una catarsis que, de ninguna manera, se ajusta a la realidad.
Estas sabandijas viven y engordan muy bien en esta vida. Ya nos encargamos nosotros de alimentarlas.
Encarna a la mujer del famoso que se ve amenazado por la publicación. Él no es el verdadero objetivo del punto de mira del director de la publicación. En realidad, es el instrumento del chantaje que le realiza para tener acceso a otro personaje más famoso, cuya vida es de más interés público, una estrella de cine.
El chantajeado Van Johnson, conoce un secreto íntimo de la vida de esa actriz y, o revela ese secreto, o verá publicado el suyo propio y su incipiente carrera se irá a la mierda.
Él es íntegro y no querrá acceder al chantaje. Pero su mujer no lo tendrá tan claro y se enfrentará a su marido por poner en peligro la estabilidad y la paz de su hogar y de su hijo.
Un final que no voy a revelar, significará una catarsis que, de ninguna manera, se ajusta a la realidad.
Estas sabandijas viven y engordan muy bien en esta vida. Ya nos encargamos nosotros de alimentarlas.