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harryhausenn rating:
7
6.0
3,278
Comedy. Fantasy
The film finds a black telemarketer struggling with self-esteem issues who suddenly discovers the key to business success. But as he's propelled to the upper echelons of his company, his activist friends are making their own stand against unfair labour practices. And then he also uncovers his corporate overlords' dark secret, which leads to him deciding whether to stand up or sell out.
Language of the review:
- es
February 5, 2019
25 of 29 users found this review helpful
Cassius es un joven que comienza a trabajar como teleoperador. Pronto se da cuenta que para que los clientes no le cuelguen ha de hablarses fingiendo la voz de un blanco. Empezará así un ascenso a la cima de la empresa para descubrir un entramado corporativo desolador. Riley retoma el testigo de Get out para volver a hablarnos, en un principio, de la identidad racial. Un sistema laboral en el que hay que adaptarse al molde del hombre blanco triunfador para poder encontrar su sitio. A la vez que Cassius inicia su ascenso, sus antiguos compañeros, su familia y su novia le reprochan su rechazo a su propia identidad pero también su individualismo frente a las organizaciones sindicales que empiezan a formarse.
Todo esto ya supone una base interesante, pero no queda ahí el asunto. Boots Riley pone toda la carne en el asador y escribe su debut en pantalla como si fuese en realidad su última película. Sorry to bother you, según van pasando los minutos, se muestra como un manifiesto contra el nuevo orden mundial. La empresa de un multimillonario californiano, un pijo egocéntrico con aires de filántropo de quinta interpretado por Armie Hammer, convierte la firma de un contrato de trabajo en deportaciones masivas a campos de concentración. Dardo directo a las polémicas condiciones de trabajo de empresas como Amazon en diversos puntos del planeta.
Todo esto ya supone una base interesante, pero no queda ahí el asunto. Boots Riley pone toda la carne en el asador y escribe su debut en pantalla como si fuese en realidad su última película. Sorry to bother you, según van pasando los minutos, se muestra como un manifiesto contra el nuevo orden mundial. La empresa de un multimillonario californiano, un pijo egocéntrico con aires de filántropo de quinta interpretado por Armie Hammer, convierte la firma de un contrato de trabajo en deportaciones masivas a campos de concentración. Dardo directo a las polémicas condiciones de trabajo de empresas como Amazon en diversos puntos del planeta.
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details.
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Spoiler:
Por increíble que parezca, la película vuelve a transgredir una barrera, ya en el tercio final del relato, para abordar la ciencia-ficción, mostrándonos los experimentos que la empresa realiza en los trabajadores: el intento de crear un nuevo ser, mitad hombre, mitad caballo, con mayor fuerza y aguante para las labores requeridas. Un despiporre que arranca tantas carcajadas como gritos de horror al ver a esos nuevos seres deformes con penes gigantes.
Sorry to bother you es un desmadre tan delirante como fresco cuyo valor va más allá de la más que evidente calidad y eficacia del conjunto. Funciona como comedia, sí, y como crítica, desde luego. Pero al igual que Get out, no es una película que se conforme con criticar, con analizar o con burlarse. Es una película que llama a la rebelión y a la acción, dirigida a un público concreto con acciones concretas. Incluso el título -Siento molestarle- parece burlarse con sorna del poder opresor contra el que se ha de responder. Somos testigos de los primeros pasos de una corriente de cine político que utiliza el cine de género como vehículo para llegar a su objetivo. Digno de admirar, digno de disfrutar, digno de reaccionar.
hommecinema.blogspot.fr
Sorry to bother you es un desmadre tan delirante como fresco cuyo valor va más allá de la más que evidente calidad y eficacia del conjunto. Funciona como comedia, sí, y como crítica, desde luego. Pero al igual que Get out, no es una película que se conforme con criticar, con analizar o con burlarse. Es una película que llama a la rebelión y a la acción, dirigida a un público concreto con acciones concretas. Incluso el título -Siento molestarle- parece burlarse con sorna del poder opresor contra el que se ha de responder. Somos testigos de los primeros pasos de una corriente de cine político que utiliza el cine de género como vehículo para llegar a su objetivo. Digno de admirar, digno de disfrutar, digno de reaccionar.
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