Cuatro estudiantes chorreras de guasinton se van a los Urales o por ahí a buscar una nave espacial, al yeti o a Torrrebruno, es igual. La primera hora es.., !nada¡, no nada, nada cero, cero culo. Luego aparecen unos soldados que se lían a tiros, así que la pandilla feliz se esconde en un búnker donde dormitan famélicos, unos ectoplasmas con muy mala hostia que se los quieren comer (es que las traslocaciones de materia producen un flato terrible). Y todo eso en los últimos minutos. ¡Y ya!
En realidad el argumento es lo de menos, lo terrible es el desarrollo de la película. Lo hemos visto mil veces. Más de lo mismo. Otra mugre cámara en mano predecible, nefasta y con adolescentes cochambres intentando hacerse un hueco. No entiendo como puede tener un 5 de media.