La historia se centra en Matilda Wormwood, una niña con una familia que la repulsa por su interés por la cultura.
El padre es un sinvergüenza, que estafa diariamente a sus clientes.
La madre es una ludópata hipócrita.
El hermano encarna a esa juventud que irremisiblemente estamos consiguiendo: Obesa, estúpida, regida por la ley del mínimo esfuerzo...
Frente a este panorama, Matilda se crece, se abstrae y desarrolla su talento hasta límites insospechados.
La película, como bien dice la crítica de Pablo Kurt, hace reir más a mayores que a niños: es ácidamente irónica, una crítica a la sociedad de hoy en día, una afrenta a la gilipollez televisiva reinante.
Si vieron la película, ríanse a sus anchas con el spoiler.
Por cierto, INCONMENSURABLE Danny DeVito
Spoiler:
Dos momentos míticos de la película:
1. Tú eres tonta, yo listo; tú pequeña, yo mayor; tú no tienes razón, yo siempre. Y no puedes hacer nada para remediarlo.
2. Momento familiar. Concurso "Pégueme y págueme" en la tele. El padre devora unos snacks y le pregunta a Matilda qué cojones está haciendo leyendo un libro. Valga esta escena de apenas 30 segundos para hacer reflexionar a una sociedad enferma como la actual durante varias horas.